Seculo hotel en oporto
Desglosando Seculo hotel en oporto
Después de visitar la Sé puedes bajar por las estrechas calles y escaleras del antiguo Barrio Do Barredo, un indispensable para todos y cada uno de los turistas que buscan la auténtica esencia de la urbe. Este distrito está un poco estropeado, con edificios que parece que se vayan a caer y balcones con ropa tendida.
Avanzando por la Rua de Santa Catalina vas a quedar fascinado por los artesanos y artistas callejeros de la Feria de Artesanato de Santa Catarina. Si bien una de las joyas de esta calle es el Café Majestic, símbolo modernista del ambiente cultural y artístico de la Belle Epoque portuense.
El río Duero es la sangre que da vida la ciudad. De la Plaza de la Ribera como núcleo de venta de pescados y mercancías hay menciones de época tan viejas como 1389. Algo más de 6 siglos después, la Ribeira es un privilegiado punto de encuentro, de día y a la noche, para comer, beber y pasear.
En los aledaños de la catedral, podrás hallar varios miradores desde los que podrás tener unas vistas brutales sobre la ciudad, el Duero y la ribera de Vila Nova de Gaia. Sin embargo, hay un pequeño mirador, situado justo a la entrada de la estrecha Rua das Aldas, que ofrece un paisaje en especial bonito.
No puedes marcharte de la ciudad sin haber probado la comida habitual como las conocidas Francesinhas en Café Santiago, se trata de un super sandwich con un montón de ingredientes que seguro que no te dejará con hambre. También puedes probar el bacalao siendo muy renombrado en todo Portugal.
Al lado del Palacio del Bolsa, se halla la iglesia de la ciudad de San Francisco, construida desde mil doscientos cuarenta y cinco y que es otro de los lugares que visitar en Oporto más indispensable. En el interior de este templo de estilo barroco se encuentran tres naves revestidas con tallas doradas.
¿Sabías que en Oporto se halla uno de los McDonalds más bonitos del planeta? Seguramente pasarás muy cerca así que no está de sobra echarle una ojeada, se encuentra muy cerca del ayuntamiento y de otros lugares de interés turístico.
La zona de los aledaños de la Rua de las Flores es perfecta para probar la exquisita comida local como el Pulpo al Lagareiro en el restorán O Buraquinho da Se o la francesinha y el Balcalhau a Brás en la Petisqueria Voltaira, dos de los mejores restoranes donde comer bien y barato en Oporto.
Si eres un amante del fútbol no te puedes perder el museo FC Porto el cual ofrece un viaje interactivo con el que recordarás noches de gloria de Liga de Campeones y jugadores legendarios. Acá se expone la memoria de más de cien años de historia del club a través de trofeos.
Si deseas desconectar del ajetreo de la urbe, te recomendamos acercarte en bus o andando a los jardines del Palacio de Cristal, otro de los lugares que ve en Oporto más bonitos. Este parque de estilo romántico lleva abierto al público desde mil ochocientos sesenta.
Muy cerca del centro de la ciudad, se halla este precioso parque que ostenta este nombre tan peculiar: el Palacio de Cristal. No hace falta que procures dentro un palacio, el nombre hace referencia a que alguna vez allá hubo un palacio.
Braga es la capital romana de Portugal y su catedral, además de los santuarios del Bom Jesus y Sameiro; entonces descubre Guimaraes siendo patrimonio de la UNESCO en un tour que te ofrecen muchas agencias de hasta 9 horas de duración.
Para poder ver bien el río, lo más conveniente indudablemente es el crucero en barco por el Duero. La mayor parte de las empresas que ofrecen dicho crucero están ubicadas en la ribera de Vila Nova de Gaia, justo en frente de la zona donde se encuentran las bodegas.
El monumento por excelencia a visitar en tu escapada de la ciudad es el Complejo de Bom Jesus do Monte. Una exquisitez del neoclasicismo por la que naturaleza y religión se unen en una intrincada escalinata barroca que levanta el santuario más de cien metros mientras que relata el Vía crucis por medio de las capillas que hallarás a lo largo del paraje.